¡ Permanecer en Jesús !


Cuando se vive separado de Dios no existe un avance en la fe. Nosotros somos como las ramas de un gran árbol, que solo producen frutos cuando están pegadas al él. Igual que este ejemplo es el ser humano, cuando él no vive en comunión con Dios, se va secando y es así que no tiene fuerzas para vencer las dificultades de la vida. En la verdad nuestra vida depende de la comunión que se tiene con Dios.

Cuando permanecemos en el Señor Jesús, Él también permanece en nosotros. Es así que las metas y los sueños se cumplen a través de estar apegados en el Señor Jesús, porque es Él quien nos da la victoria. La Palabra de Dios lo confirma: “Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí”. (Juan 15:4).

Creer y permanecer son dos cosas diferentes. La persona puede tener su religión y participar en una iglesia, pero esto solo está demostrando que ella cree en Dios. Permanecer es vivir una vida comprometida con Dios, es vivir en fidelidad a Él. Grandes ejemplos de permanencia en Dios, se encuentran inscritos en la Palabra de Dios, que fueron héroes de la fe. Estos hombres no eran diferentes a nosotros, ni tampoco fueron privilegiados por Dios, ni escogidos por Él, muy por el contrario, ellos eligieron a Dios. Estos hombres tomaron la decisión correcta y escogieron seguirlo, pusieron por obra la Palabra de Dios y a causa de esto fueron exitosos.

Todo ser humano tiene la oportunidad de querer seguir o no seguir a Dios, la Palabra es llevada a todos y es aquí donde cada quien elige. Unos escucharon la Palabra y después decidieron no asumir un compromiso con Dios y se fueron, otros escucharon y decidieron lanzarse, entregar su vida a Dios y poner en practica Su Palabra y hoy se encuentra venciendo, otros apenas están escuchando la Palabra y han tomado la decisión de entregar su vida a Dios, por lo que hoy están conquistando.

Dios quiere hacer cosas grandes en la vida de cada uno de nosotros, como hizo con los hombres del pasado. Él quiere que tengamos una vida de felicidad y éxito. Pero esto depende solo de uno mismo.

Yo no puedo cambiar la vida de las personas, pero si puedo mostrar el camino hacia Dios, pero está en usted decidirse, ya que esto es algo muy personal. Cada decisión que uno toma depende de nuestra fe. Si usted reconoce que el Señor Jesús, es el camino, la verdad y la vida; reconoce que solo Él puede sacarle de donde se encuentra y hacerle feliz, entonces tenga la seguridad que esta decisión le llevará a un verdadero cambio de vida.

Si usted hasta ahora no se ha sentido feliz como ha vivido, es necesario pensar y reflexionar, verificar donde se encuentra fallando, porque en la verdad Dios no falla. Son innumerables los testimonios que día a día pasamos y mostramos, personas que fueron sanadas de enfermedades incurables, el matrimonio, la familia fueron restaurados, personas que hoy tienen una vida económica bendecida, son prosperas, pero cada una de estas cosas aconteció porque ellas eligieron a Dios, eligieron buscar de Su Presencia y permanecer en Él.

La cosa mas importante que puede acontecer en la vida de alguien es tener un encuentro con Dios, es rendirse Él y esta es la única garantía para ser feliz. Cuántas no son las personas que han logrado muchas cosas en su vida, a través de su esfuerzo, de su sabiduría, de su inteligencia, pero no son felices, porque en la verdad no conocen a Dios, no viven la Palabra de Dios, es por esto que más tarde se puede escuchar o ver que aquellas personas que conquistaron tanto terminan en una situación muy desagradable (drogas, alcoholismo, suicidio, etc.). Cuando la persona no conoce a Dios, ella es infeliz y siempre se encuentra buscando llenar aquel vacío que ella tiene y que con nada lo puede llenar, Dios es el único que puede llenarlo a través de Su Espíritu.

Lo único que nos puede garantizar el poder tener una vida feliz es permanecer en Jesús y entregarnos a Él. Porque si usted se aferra al Señor Jesús, las luchas pueden venir, pero Dios siempre le dará la victoria sobre cada una de ellas, pero en usted está la decisión. La transformación de vida no acontece de un día al otro, todo es cuestión de perseverancia, de vivir la fe y permanecer en Él, es así que usted vera como lo imposible se tornara en posible. Dios los bendiga.
Obispo Paulo Roberto.

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